¡Este desafío definitivamente pone a prueba la agudeza visual y la rapidez mental! Si aún no has encontrado al gato, no te preocupes, ¡es un reto difícil! Sin embargo, si te rindes, puedo ofrecerte la solución. Recuerda que resolver acertijos como este puede mejorar tus habilidades de observación y concentración. Además, siempre puedes volver a intentarlo más tarde para mejorar tu tiempo y destreza. ¡Mantente motivado!