Fui a buscar a mi esposa y a mis gemelos

Cuando los vi, mi corazón empezó a cantar. Tanto la habitación del bebé como el coche estaban llenos de globos, y era difícil creer lo limpia que estaba la habitación del bebé. Mientras nos preparábamos para conocer a nuestro nuevo miembro de la familia, las canciones favoritas de Suzie sonaban suavemente. Quería que su regreso a casa fuera lo más memorable posible después de todo lo que había pasado durante su embarazo. Sin embargo, cuando llegué a su habitación en el hospital, me sorprendí al descubrir que Suzie no estaba. Lo único que había sobre la mesa era una nota escrita a mano por ella que decía: “Me voy. Asegúrate de que se mantengan sanos y salvos. Sería mejor que entiendas por qué tu madre me hizo lo que me hizo”. La ansiedad se apoderó de mí mientras corría a la estación de enfermeras, pero me informaron que Suzie se había ido esa mañana temprano. No tenía idea de por qué se había ido, y todos parecían sorprendidos también.