Mi dilema comenzó cuando cuidaba de mis nietos mientras sus padres estaban en México. Durante su ausencia, decidí llevarlos a Disney World, ya que había una fiesta de cumpleaños allí. Pensé que sería una oportunidad para crear recuerdos especiales, pero cuando regresaron, mi nuera Sarah se sintió profundamente herida, ya que sentía que le había robado un momento importante: la primera vez de los niños en Disney. Ethan, mi hijo, insistió en que me disculpara, pero no entendía por qué debería hacerlo. Ahora me encuentro cuestionando si actué mal. Tal vez debería haber consultado con ellos antes, pero mi intención era simplemente acercarme a mis nietos. ¿Me equivoqué al llevarlos sin su permiso?